Tal y como adelantó el viernes diariodelpuerto.com y ayer se
detalló con amplitud, las disensiones sobre la ultractividad del futuro
convenio impidieron en la tarde del viernes alcanzar un preacuerdo en
torno al IV Acuerdo Marco de Estiba, sobre el que a última hora había
un amplio consenso en cuestiones como la subrogación de las plantillas
ante un posible cambio legislativo, medida que supondría blindar a los
estibadores y garantizar su puesto de trabajo ante un cambio de modelo.
Según fuentes de la mesa negociadora consultadas ayer por este
Diario, en esencia la negociación estaba prácticamente cerrada el
viernes, salvo el escollo final de la ultractividad así como dar el
visto bueno a la redacción exacta de alguno de los últimos puntos
consensuados.
Entre ellos estaría, de aprobarse definitivamente lo acordado, la introducción de una cláusula que obligaría a la subrogación de los trabajadores de las sociedades de estiba en caso de que el modelo actual quedara desmantelado por razones legislativas.
Ante el escenario generado tras la denuncia de la Comisión Europea contra el Reino de España por infringir su régimen de estiba portuaria el principio de libre establecimiento empresarial, sindicatos y patronal buscarían en el IV Acuerdo Marco un consenso que garantizara los puestos de trabajo ante una posible desaparición o transformación de las sociedades de estiba (bien fruto de la sentencia del Tribunal de Luxemburgo bien por iniciativa de Puertos del Estado para adelantarse a la sentencia), generándose un pasivo que de acuerdo con lo preacordado deberían asumir vía subrogación los nuevos agentes intervinientes.
Complemento de antigüedad
Esta sería alguna de las medidas más destacadas del texto que el viernes ultimaban patronal y sindicatos, que también contemplaría la supresión del complemento salarial por antigüedad.
En el caso de las actuales plantillas, dicho complemento quedaría congelado, manteniendo cada trabajador el nivel actual de este complemento retributivo y no acumulando más por razones de antigüedad. En el caso de las nuevas incorporaciones, este complemento ya no será contemplado.
Igualmente, dentro de la flexibilidad en cuanto a costes laborales que aporta el nuevo convenio que el viernes se ultimaba, estaría el tema del Grupo 0 y las nuevas incorporaciones a la plantilla, que durante tres años y en proceso de formación supondrían un coste laboral menor.
Como adelantó el viernes diariodelpuerto.com, pese a estos consensos y la posibilidad cierta de cerrar un preacuerdo, a última hora de la tarde del viernes se rompió la negociación ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo en torno a la ultractividad del nuevo convenio.
Igualmente, quedaban algunos flecos por concretar, como el tema del computo total anual de jornadas y el límite máximo a partir del cual se debe ampliar plantilla en la sociedad, defendiendo la patronal que se ampliara el techo actual del 100% de trabajo y se produjeran las ampliaciones de plantilla a partir del 110% o el 120%.
Patronal y sindicatos acordaron darse quince días más de negociación prorrogando hasta el 19 de julio la ultractividad del III Acuerdo Marco, que por la reforma laboral decaía ayer, garantizándose así la seguridad jurídica en los próximos días.
Entre ellos estaría, de aprobarse definitivamente lo acordado, la introducción de una cláusula que obligaría a la subrogación de los trabajadores de las sociedades de estiba en caso de que el modelo actual quedara desmantelado por razones legislativas.
Ante el escenario generado tras la denuncia de la Comisión Europea contra el Reino de España por infringir su régimen de estiba portuaria el principio de libre establecimiento empresarial, sindicatos y patronal buscarían en el IV Acuerdo Marco un consenso que garantizara los puestos de trabajo ante una posible desaparición o transformación de las sociedades de estiba (bien fruto de la sentencia del Tribunal de Luxemburgo bien por iniciativa de Puertos del Estado para adelantarse a la sentencia), generándose un pasivo que de acuerdo con lo preacordado deberían asumir vía subrogación los nuevos agentes intervinientes.
Complemento de antigüedad
Esta sería alguna de las medidas más destacadas del texto que el viernes ultimaban patronal y sindicatos, que también contemplaría la supresión del complemento salarial por antigüedad.
En el caso de las actuales plantillas, dicho complemento quedaría congelado, manteniendo cada trabajador el nivel actual de este complemento retributivo y no acumulando más por razones de antigüedad. En el caso de las nuevas incorporaciones, este complemento ya no será contemplado.
Igualmente, dentro de la flexibilidad en cuanto a costes laborales que aporta el nuevo convenio que el viernes se ultimaba, estaría el tema del Grupo 0 y las nuevas incorporaciones a la plantilla, que durante tres años y en proceso de formación supondrían un coste laboral menor.
Como adelantó el viernes diariodelpuerto.com, pese a estos consensos y la posibilidad cierta de cerrar un preacuerdo, a última hora de la tarde del viernes se rompió la negociación ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo en torno a la ultractividad del nuevo convenio.
Igualmente, quedaban algunos flecos por concretar, como el tema del computo total anual de jornadas y el límite máximo a partir del cual se debe ampliar plantilla en la sociedad, defendiendo la patronal que se ampliara el techo actual del 100% de trabajo y se produjeran las ampliaciones de plantilla a partir del 110% o el 120%.
Patronal y sindicatos acordaron darse quince días más de negociación prorrogando hasta el 19 de julio la ultractividad del III Acuerdo Marco, que por la reforma laboral decaía ayer, garantizándose así la seguridad jurídica en los próximos días.