Nuestra última entrada/opinión titulada ¡CHATARRA! parece que no ha dejado indiferente a quien lo ha leído, e incluso, tenemos la apreción de que ha sensibilizado a personas que tienen capacidad de decidir.
En consecuencia, vamos ha hacer dos cosas:
1.- Continúar con nuestra linea de trabajo prevista y por tanto, llevar por última vez el asunto de los anemómetros al Comité de Salud Laboral de Sestisan.
2.- Hasta que este Comité se reuna y delibere sobre el accidente de la Tolva y las posibles medidas correctoras a adoptar, hacemos las siguientes recomendaciones.
a) La Tolva Automatizada Doble de T.M.S. es la única que creemos cumple con todas las exigencias de seguridad al 100%, ya que cuenta con señal de aviso por sobrecarga. Sin embargo tiene una pequeña pega que se puede corregir facilmente. La señal de sobrecarga es prácticamente imperceptible para el gruísta y por tanto bastaría con dotar de un sistema de intercomunicación Tolva-Grúa para que los trabajadores que están en la cabina de la tolva, puedan avisar al gruísta de forma instantanea del disparo de la alarma por sobrepeso y este deje de echar mercancia en la tolva hasta nuevo aviso.
b) Las Tolvas Automatizadas que no llevan cabina adosada y que se manejan con un pupitre a distancia, debido a que el puesto de maniulación está lo suficientemente alejado de la propia tolva, no conlleva ningún riesgo para el estibador que la manipula, aunque si pudieran estar en riesgo los camioneros que están debajo de ellas mientras cargan sus camiones. No sabemos que decisón se tomará sobre estas tolvas, pero en apariencia todas ellas están bien conservadas, sus medidas Capacidad/Peso parecen estar bien proporcionadas y además todas ellas cuentan con unos travesaños internos que refuerzan la parte superior, que las aporta firmeza.
c) Sobre la Tolva Automatizada de Bergé/Cadevesa, decimos que, precisamente el día 13 se había presentado un parte de incidencias sobre el estado de la misma. Su sujección o anclaje al suelo es insuficiente, ha perdido el hermetísmo de la cabina lo que hace que entre excesivo polvo en la misma teniendo en cuenta que esta se encuentra muy cerca de las bocas de apertura de la propia tolva. Pero el peligro que nosotros encontramos en este dispositivo, está en el tamaño de la propia tolva y cómo está construida.
En alguna ocasión se ha hecho la prueba y esta tolva, llena de fertilizante, cubica lo suficiente como para llenar 8 camiones, lo que supone que sus patas aguantan unas 200 toneladas más el peso de la propia tolva. El peligro nosotros le encontramos en que esta tolva, cuenta con unos travesaños internos en la parte inferior de la misma, pero no cuenta con travesaños de refuerzo en la parte superior, lo que hace que tengamos la impresión de que en cualquier momento pueda ceder uno de sus laterales desparramando toda la mercancia hacia el lateral que pudiera ceder. Hasta ver que decisión se toma al respecto, nosotros recomendamos que se den las instrucciones para que el gruísta nunca eche mercancía en la Tolva por encima de los travesaños internos (1 garrada aproximadamente de mercancia). Esta recomendación creemos debería hacerse extensible al resto de Tolvas Automatizadas, salvo a la doble de T.M.S. que cuenta con su avisador de sobrepeso. Esta recomendación debe ser transitoria, hasta que se revisen estos aparatos, ya que las tolvas deben estar construidas de forma que aguanten el peso corespondiente a la capacidad que tienen, no vaya a ser que en caso de accidente quiera alguno deshacerse de responsabilidades y le pase todo el marrón al que hecha la mercancía a la tolva.
d) Las tolvas manuales son chatarra.
