Era junio cuando nuestros empresarios nos anunciaron el inicio del proceso de transformación de nuestra Sociedad Estatal de Estiba en APIE. Nosotros dijimos que era un disparate realizarlo en ese momento, cuando la Ley de puertos había pasado de ser anteproyecto a proyecto de Ley. es decir, ya se encontraba en el parlamento. No obstante y en caliente UGT fue contundente, convocaría huelga.
Sin embargo, a posteriori y en frio, preferimos poner en práctica el principio de prudencia. Solicitamos conjuntamente con los compañeros de CC.OO. la paralización de esta transformación precisamente hasta ver como quedaba la ley, y buscando evitar el vacío legal que se podía haber producido en caso de que el Tribunal Constitucional las hubiera declarado ilegales.
Coordinadora en Santander, que tantas veces se había opuesto a la transformación de Sestisan en Apie, cambió radicalmente de opinión convirtiendo su sección sindical en una sucursal de la de Bilbao.
Nosotros mientras tanto, hemos ido comprobando como se desarrollan los acontecimientos y hemos acertado ya que según las últimas noticias, parece que no hubiera tenido sentido enviar a los compañeros a una huelga, ni parece que legalmente se vaya a poder hacer nada. Eso si, las noticias que vamos recibiendo van siendo cada vez mas esperanzadoras.
Estos son los antecedentes.
Ahora, los empresarios del Puerto de Santander se quejan de la situación económica de la APIE, cuando ellos ya la constituyeron con un déficit importante, y nos piden un ERE.
Para nosotros el orden de factores tiene importancia y podríamos estar hablando en otros términos en el caso de que nos hubieran hecho caso.
De haber aplicado el principio de prudencia que hemos tenido UGT y CC.OO. estaríamos en otra situación. Quizá en el momento de aprobarse esta Ley no les habría quedado otro remedio que constituir la APIE o como quiera que lo denomine la futura ley, y por supuesto, que ante una situación impuesta para ellos y nosotros, responderíamos de otra forma.