Terminamos el pasado año de forma estupenda, con acuerdos y un importante margen temporal de paz social. Eso creíamos y eso esperamos que suceda pero, al menos de momento, dos asuntos han empezado a desestabilizar la tranquilidad que presumíamos íbamos a tener.
La primera tiene que ver con la última noticia que publicábamos el pasado año, las rampas. No vamos a realizar ninguna valoración hasta tener una nueva reunión con algún responsable de la Autoridad Portuaria y aclarar la situación.
La segunda tiene que ver con las repercusiones que para nosotros pudiera tener cierto cainismo empresarial.
Esperemos que la trayectoria de diálogo que tan buen resultado nos ha dado a finales de 2009, no se deteriore y sigamos encontrando soluciones.
En cuanto al aspecto económico, deciros que hoy hemos tenido la primera reunión de la comisión de seguimiento creada para afrontar el período de crisis. Tenemos dos datos positivos al respecto, el pasado año fue menos malo de lo que en principio se esperaba y enero está siendo mucho mejor que el del 2009.